TRIBUTO A UN MAESTRO

Hace muchos años el artista Piero, cantautor de canción social, trova y rock nacido en Italia, escribió una canción dedicada a su padre, quién en realidad había muerto hacía ya tiempo. De esa canción siempre recuerdo los siguientes versos:

Mi Viejo

Viejo, mi querido viejo

Ahora ya caminas lerdo

Como perdonando el viento…

 

Mi padre fue un maestro de diálogos y enseñanzas de vida.

Recuerdo tu sonrisa. Sus ojos sonreían con mirada pícara. Pero esa sonrisa no era el resultado de una vida fácil y feliz. Era, más bien el saber vivir el momento presente ya que por el contrario, su vida había sido muy difícil y triste.

Él nos contó que su padre había muerto cuando él era muy chiquito, rodeado de hermanos con una mamá fuerte y luchadora salieron adelante. Nos contaba su vida de huérfano pobre y sin recursos, lo que sí recuerdo es que nos enseñó a luchar sin rencores ni protestas ¡Qué enseñanza! “sin rencores ni protestas”. En cambio dedicaba todo su tiempo libre a rodearse de chicos y jóvenes a los que llevaba a su club y les enseñaba a jugar basket. “hay que sacarlos de la calle” decía, para que un día sean hombres de bien” Confiaba en su potencial y ellos lo respetaban y querían.

Yo aprendí a mirar y tener en cuenta a los otros, a los que deambulaban por la calle, a los que nos necesitan sin saberlo.

Recuerdo como caminaba lento y con los puños cerrados ¿Tuviste que luchar papá? Muy probablemente.

Agradezco siempre tu valor y tu entrega.

Un día se enfermó y se fue de este plano solo y en silencio en aquél hospital.

Papá, mi maestro de siempre, te quiero, te recuerdo y te imagino conmigo cuando la vida aprieta.

 

...Yo soy tu sangre, mi viejo,

Soy tu silencio y tu tiempo

El dolor lo lleva dentro

Y tiene historia sin tiempo.

Piero: “Mi Viejo”

 

Clara Molina - 2023