jueves, 27 de junio de 2024

 

Cuento fantástico

 

Enviados al futuro

 

Es el año 2050. Desde la central de operaciones cuánticas, la O.O.O. de IA se prepara un operativo internacional.

ILUXUS, el robot más avanzado del mundo, creado por la IA intervención del ser humano, ha realizado un casting entre todos los habitantes del planeta Tierra.

El objetivo era elegir cien personas de distintas regiones, que no se conozcan entre sí, para ser enviadas al futuro del siglo XXX.

Se trataba de una misión, secretísima, que solo conocen unos pocos científicos, responsables de salvar a la humanidad de los peligros que la acechan.

Ante mi sorpresa, se me informó que resulté seleccionada. Yo no me había presentado a la misma puesto que no estaba interesada. Tuve que aceptar, ya que no había forma de desobedecer las órdenes sin ser seriamente castigada.

Me informaron que no podía llevar nada conmigo, en este viaje, del cual se desconocía la duración y el destino. Solo se me permite llevar dos objetos, inanimados, de mi elección.

Me pasé la noche, sin pegar un ojo, pensando. Eran tantas las cosas que quería llevar, que no podía elegir solo dos. Me preguntaba si era buena idea que fuesen objetos cercanos a mi corazón u objetos que fueran útiles. Lo hacía más difícil, aún, el no tener ningún dato sobre el tiempo de duración ni el destino.

Le pedí consejo a la IA, que me sugirió que llevara una radio portátil. Me pareció buena idea para no quedar ajena a lo que dejaba atrás. Y seguir informada sobre el pasado.

El otro podría ser un grabador de voz, para dejar un testimonio de todo lo que vaya experimentando. Pero preferí llevarme la foto de mi novio, con el que ya teníamos planeada la fecha de casamiento. Él no forma parte del contingente.

Cuando vuelva del futuro, les seguiré contando. Espero no olvidarme de nada, ya que no tendré con qué tomar nota de todo.

¡Adiós a todos!

 

Nela Bodoc – 2024

 

 

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