Reunión en Familia
Vienen a mi mente viejos recuerdos de mi infancia y juventud, algunos de
ellos, los más relevantes en mi vida, son aquellos domingos en familia. Domingos
bulliciosos, .muy concurridos.
Una extensa mesa en la que compartíamos no solo los almuerzos, sino también
historias, conversaciones incoherentes, provocados por los oídos atrofiados de
los más ancianos y también por la ansiedad de hablar todos a la vez, levantaban
la voz para para hacerse oír y sólo se escuchaban los gritos.
La juntada por lo general se hacía en la casa de mis abuelos Alberto y
Derlinda, a los que íbamos los hijos, nietos y bisnietos. Mi madre Leonor
hacía pastas caseras, mi padre Oscar el asado a la parrilla o en el horno de barro.
Todo iba bien, pero la comunicación era mala. Estos relatos tenían un dejo de
humor, ya que los diálogos equivocados entre los presentes, y que describiré como
ejemplo algunas frases graciosas que recuerdo de aquellos momentos.
-Ese libro que está ahí es mío- dijo Miriam mi hermana -¡Seguro! ¡Hace frío! tomate un matecito- responde
mi madre.
-Abuela, tengo el Corazón lleno de amor- dice Fernando -Debes ir a
ver al doctor si te duele el corazón- contesta la abuela Leonor.
-¿Cómo le va, tía María, con la nevada? ¿En qué se vino?- Frunciendo el ceño
María contesta -¡No estoy mareada! Solo tomé una copita de vino
tinto.
Así terminaban esos encuentros. Con la alegría de compartir, un buen rato
en familia. Plenos de muchas risas y cariños. Hoy mirando hacia atrás, no
puedo evitar que caiga una lágrima de emoción y melancolía al
rememorar aquellos inolvidables y hermosos tiempos.
Estela
Puebla Estrella- 2021
Hermoso relato amiga.
ResponderEliminarAny Muñoz