viernes, 19 de agosto de 2022

 

Creencias  urbanas

 

Una de tantas

 

Descubrí, hace poco, que una de mis mejores amigas es bastante supersticiosa.

Estábamos en mi casa tomando el té y compartiendo un grato momento, cuando recordamos que teníamos un compromiso con otra de nuestras amigas. Nos dimos cuenta que estábamos escasas de tiempo por lo que salimos apresuradamente.

Habíamos recorrido algo más de una cuadra, en dirección de la parada de micro, cuando recordé que no llevaba la Sube, la tarjeta para abonar el pasaje. Le dije a mi amiga que teníamos que volver a casa para buscarla. Y así lo hicimos.

Me llevó un buen rato encontrarla porque soy un poco desordenada. Ella comenzó a ponerse nerviosa y me señaló que nos quedaba poco tiempo para alcanzar al micro.

Cuando atravesé el umbral de la puerta y me disponía a echar llave, pegó un grito – Tenemos que sentarnos en una silla antes de volver a salir. ¡Es mala suerte si no lo hacemos! ¡Nos puede ir muy mal!

Luego de mi sorpresa le contesté - ¡Bah, son pavadas. No puedo creer que pienses así! Y haciendo caso omiso de su advertencia, cerré y partimos casi corriendo a la parada.

Llegamos, casi sin aire, e hicimos la seña al último micro que pasa por mi barrio. Pasó delante de nuestras narices, sin aminorar la velocidad, ignorándonos por completo.

Enojada, mi amiga exclamó- ¡Viste, te lo advertí!

                                                                                              Nela Bodoc - 2021

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

  Reflexión     Los seres que aman derriban barreras, acercan, escalan montañas. Los seres que odian separan, levantan murallas, no ...