martes, 8 de diciembre de 2020

 


Una cierta noche miré al cielo y vi muchas estrellas, había una

en especial, cuyo resplandor era tan fuerte que iluminaba mi

rostro, dándome la claridad que necesitaba para llenarme de

osadía y emprender mi viaje sin retorno hacia el mundo de la

fantasía, que está lleno de color y vida, acompañada de la

amistad de los seres celestiales, hasta la culminación de mis

días.

 Basilia Arenas  - 2020

 

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