lunes, 20 de marzo de 2023

 

            

                            Jardín de la esperanza

 

Estoy sola, orando. Siento el palpitar de mi corazón, el respirar pausado de mis pulmones tranquilos.

Ilusionada, buscando la novedad de alguien que golpea la puerta, abro la salida de mi departamento, y un jardín maravilloso se despliega frente a mí.

Flores de distintos colores, tamaños y texturas. Se distribuyen por doquier. Se encuentran entre ellas violetas, margaritas, lavandas… ¡Hay tantas!

Un camino de piedra laja me invita a recorrerlo. Mis pasos son cuidadosos, curiosos, asombrados por lo que les rodea. Aromas, perfumes variados acompañan, junto con una brisa primaveral y un cálido sol de amanecer.

¿Quién diseñó este jardín tan hermoso? ¿Cómo lo armó? ¿Cómo comparto con mis amigas esta nueva caricia?

Me siento sobre un tronco a un costado, me enderezo y miro al cielo, elevo una oración a la Madre Divina. Miro con suavidad y asombro cada rincón, cada mata de flores, cada rayo de sol que se llena de colores.

Saco mi cuaderno y dibujo con una dedicatoria para mis amigas, no puedo cortar ni un pétalo.

Y ese sendero que me guio bajo el sol, me pide que salude con amor y regrese a mis tareas diarias.

Así hago, con una poesía, un perfume y un color, para cada amistad, para cada llamado de esperanza.

                                               Gabriela Medawar - 2023

1 comentario:

  1. ¡Qué hermoso! No recordaba este relato, pero ciertamente se da así en mis ratos de recogimiento. También lo voy a compartir en el Hogar. Abrazo fuerte.

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