BUSCANDO UN
FUTURO MEJOR
Alika es silenciosa y ordenada, desde que llegó de su lejano
país vive en un barrio lejos del centro, comparte la habitación con una persona
que está en su misma situación, ambos son ilegales e indocumentados. Ella ocupa
el cuarto de día, ya que por las noches trabaja en un boliche de muy mala
reputación, cada vez que sale guarda con llave sus sábanas y toallas en su
valija. Es Licenciada en nutrición, pero sin documentos y con escaso conocimiento
del idioma, es al único trabajo que por ahora puede aspirar.
Guarda en el ropero la foto de su hijo y la besa cada vez
que regresa de su larga jornada, aún le duele en cuerpo y alma recordar cuando
se despidió de él y también recordar el día que su esposo se ahogó durante el
viaje.
Sus ojos marrones reflejan su profunda tristeza, para no
morir de soledad, compró una pecera con un pequeño pez, al cual le habla como
si fuese su hijito.
Nabil es un muchacho alegre a pesar de todo, sobrevivió a la
penosa travesía para llegar hasta acá. Salió de su tierra con la esperanza de
una vida mejor y tiene fe que así será.
Oculta la foto de su esposa entre sus ropas y la mira con
amor, no sabe nada de ella y la extraña mucho cada día que pasa tan lejos.
Él ocupa el cuarto por las noches, de día trabaja en una
construcción y regresa agotado, puso en la pared la foto de un bonito perro,
tal vez sea su mascota.
Es un joven creyente y reza cada mañana por su familia,
también ruega a Alá que proteja a la persona que ocupa el cuarto durante el
día.
Al igual que Alika, guarda sus sábanas en la valija antes de
salir para el trabajo.
Tal vez algún día se conozcan y puedan entablar una charla,
tienen mucho en común para contarse, la vida del inmigrante es demasiado dura y
la falta de un abrazo a veces duele más que una herida de bala.
Ana
María Muñoz - 2023
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