El otoño
Pasan los
días, los meses, los años esperando que vuelvas.
Te extraño, te
busco y no veo señales certeras.
Extraño tus
colores de oro vibrante, de cobre brillante.
Extraño tus
olores, tus crujientes ruidos y tus dulces sabores
que aún
paladeo en mi frágil memoria.
Te extraño
porque en vez de los trinos de las aves cantoras
escucho el
arrullo de grises palomas.
Cuando el
cielo se nubla corro a tu encuentro
esperando la
fresca brisa que acaricia el rostro, o el zonda que arrecia,
pero… rayos y
truenos me responden ¡No es lo que espero!
Tanto te
añoré, tanto te busqué que, como no pudiste venir a mi lado
me llevaste a
tu encuentro, vestido de cobre y dorado
que ahora no
brilla en mis ojos de pena nublados.
¡Ay otoño! ¡Ay
otoño! ya a ti no te extraño ¡Pero extraño a mi hermano!
Anamá - 2022
No hay comentarios:
Publicar un comentario