viernes, 28 de febrero de 2025

 





                Trato de revivir dinosaurios y descuido las bacterias que me están matando.



 


No hablemos del

dolor, no hablemos más

de amor ni de luces

ni señales de paz

con ojos de ciego

encontraré la muerte.

Quiero una vida

en paz, que no existe acá

dicha en la tierra

con días hermosos

de humores sombríos

flotando en arpegios

como alas al viento

 

                Clara Molina – 2024


 

jueves, 27 de febrero de 2025

 

Vivencias

 

                                               La cena de graduación.

En 1962 cursaba yo mi último año de secundaria. Asistí los seis años que duraba el curso nocturno (el diurno era de cinco años) en una escuela de enseñanza comercial que tenía ambos y, según recuerdo, las mismas autoridades, y no teníamos ningún contacto con los alumnos de la tarde.

Ese año fue muy especial a nivel nacional, pues vivimos un golpe de estado que cambió, una vez más, la vida institucional del país, a lo que se sumaba la expectativa de crisis internacional a causa de la guerra fría.

Llegamos con desánimo a Noviembre y aún no teníamos decidido cómo celebraríamos nuestra graduación, pero no pensábamos ignorarla. Había algunos inconvenientes, sobre todo por causas económicas, así que decidimos hacer una cena sólo para nosotros, no participarían nuestras familias, e invitar al rector, la vicerrectora y el celador del grupo, y dividiríamos el importe general entre los alumnos.

Pero, como ya dije, las autoridades lo eran de ambos turnos, y no teníamos contacto con el otro turno, y a último momento nos enteramos que el rector ya se había comprometido con los alumnos de la tarde y que con nosotros solo estaría la vicerrectora, una persona muy especial que trataba a cada uno como si fuera una abuelita amorosa, pero quizás sentíamos pena que esto hubiera coincidido en una misma fecha y, según algunos, que nuevamente pasáramos a segundo plano.

Llegó la hora de los discursos, y uno de mis compañeros se levantó y, tomando una seriedad extraña en él, anunció con voz de locutor profesional “Unas palabras de nuestro querido rector, señor Jorge Reta, al que recibimos con un aplauso.” Todos miramos hacia la puerta de acceso, pero no aparecía. Otro de nuestros compañeros se acercó al micrófono y tomando una actitud corporal y gestual propia del rector, comenzó un discurso con idéntica tonalidad a la del representado, con palabras tan acordes al momento que se celebraba que se podría haber confundido con el original. Sólo que, a pesar de todos los consejos y buenos deseos que nuestro “rector” nos transmitía, no podíamos tomarlo en serio y nos reíamos hasta las lágrimas, cambiando mágicamente el estado de los presentes. También se sumaron los mozos del local donde celebrábamos y algún otro curioso.

Fue la noche más feliz e inolvidable de nuestro secundario, y que 62 años después aun me despierta una sonrisa de felicidad.

                                                                                              Asunción - 2024

 

miércoles, 26 de febrero de 2025

 


Aforismo


            Amar sin calificativos, sin peros, sin “aunque”.

                                               AMI - 2024



martes, 25 de febrero de 2025

 

Micro cuento

 

                                                               Adiós                                                  

Colándose por la ventana indiscretamente, la luna iluminaba su espalda de bruñido bronce.

A través de sus lágrimas, ella observaba como queriendo detener el tiempo.

Estuvo a punto de acariciarla por última vez.

Tomó su maleta llena de silencios, desencuentros, dolor y otros menesteres.

Salió de puntillas dejando su historia detrás de la puerta.

                                                               Nela Bodoc – 2025



lunes, 24 de febrero de 2025

 

CAMBIAR

 

He pasado la mayor parte de mi vida tratando de cambiar, como si fuera la consigna de mi existencia. Y tal si fuera una creación de algún científico loco, no sé cuál de todas las partes es original, o sea que no sé quién soy, si es que ese saber sirve para algo.

 He tratado de adelgazar, de saber, de creer, de leer, de cuestionar, de que mi pelo sea ondulado, o rubio, de que me aprueben, de que me consideren, de que lean lo que escribo, de que sepan quién soy, y he perdido de vista los anhelos de aquella niña que se recostaba sobre la hierba en las noches de verano, tejiendo sus sueños a la luz centelleante de las estrellas y los pequeños  flashes de las luciérnagas, oyendo la música del agua en las acequias y el suave roce del viento en los sauces.

 No sé si soñar es ser, pero al menos generaba mis propios anhelos.

 

                                                           Asunción – 2003

 

 

 

 

 

viernes, 14 de febrero de 2025

 


¿Quién rezará

cuando duermo, en el jardín?

Llegan murmullos,

las ramas se han movido,

he soñado quimeras

voces henchidas de amor.

                Clara Molina - 2024



jueves, 13 de febrero de 2025

 

Entrevista

               

                                                               Mafalda

El diario me ha encomendado una entrevista a Mafalda, la niña estrella del gran creador Quino Lavado, para lo cual hice una cita con ella, que ya no es una niña, pues ha cumplido 59 años. Nos recibió en su coqueta casa de Chacras de Coria, Luján de Cuyo, Mendoza.

Diario- Hola Mafalda ¿Cómo te sientes sin tu trabajo, y sobre todo, sin el apoyo de tu creador, El genial Quino Lavado?

Mafalda- ¡Oh! Bien, me siento bien generalmente. Extraño mucho a Quino, mi querido Joaquín, pero bien. Estoy un poco alejada de los escenarios, pero sigo haciendo preguntas, a veces poco reflexivas, que incomodan a la gente, pero ya saben cómo soy.

Diario- interesante, es difícil que uno cambie, lo entiendo, pero ¿Qué hacés con las respuestas que te dan?

Mafalda- las razono, les busco el lado útil.

Diario- ¿Y cuándo le encuentras ese lado?

Mafalda- ya sabés como soy, y el público también lo sabe. Estoy escribiendo un libro, mejor dicho, dos libros. En uno está toda la historia de mi familia y mis amigos, mi barrio, mi escuela y en el otro, como ensayo, mis observaciones de la sociedad, de la gente, del mundo ¡De mi amado globo terráqueo! Me rio pero no es para chiste lo que pasa, y lo que hacemos para que nos pase y le suceda al Planeta.

Diario- ¿Cómo qué?

Mafalda- Y, por ejemplo la contaminación de los ríos y los mares, del aire, la desforestación de las selvas y los bosques, la extinción de especies… También el hambre, las guerras y agresiones entre países o creencias y todo eso, que a pesar del tiempo no logramos cambiar.

Diario- ¿Y tu familia? ¿Tus amigos de la infancia?

Mafalda- bueno, mi papá está jubilado de su trabajo, ya no tiene su Citroen 3CV. Mi mamá se jubiló como ama de casa, tiene amigas con las que se reúne a tomar té y jugar a la canasta, y como le gustaba la música canta en un coro. Guille es abogado. Felipe es poeta, siempre soñador; Miguelito es matemático, siempre tan práctico; Libertad recorre el mundo con su pareja en una casa rodante y manolito vive en España, dueño de un restaurante. Y aunque no lo creas, Susanita nunca se casó, pues no encontró el hombre ideal.

Diario- Gracias Mafalda, por recibirme y por contestar todas mis preguntas ¿Puedo darte un abrazo? Hasta otro momento.

Mafalda- Hasta pronto, gusto en conocerte.

                                                                       Asumi - 2023

 

miércoles, 12 de febrero de 2025

 

Microcuento



            El caballo no había bebido, pudo conducir al jinete hasta su casa.

                                     AMI - 2024



martes, 11 de febrero de 2025

 


Es domingo, me detengo

Y solo observo en silencio

Agradezco lo que tengo

Y doy las gracias, señor

Porque siempre alrededor

Existe un alma carente

Y yo gozo suficiente

Soy muy rico, siento amor

La sencillez de mi mesa

Claridad, de pensamiento

Siento un techo en mi aposento

Y nació una nueva flor

Disfruto el tenue calor

Que mis muros proporcionan

Y mi lecho siempre entona

Y en reposo una oración

Por eso, por eso pido mi Dios

Por siempre habites mi mente

Mi opulencia está en tenerte

Y no lo supe hasta hoy.

                                               Alberto Coronel – 2024

 

 

lunes, 10 de febrero de 2025

 

Micro cuento

 

Dejó los zapatos en la entrada, llenos de barro.

Sacudió su cabeza decorando con gotitas de lluvia el espejo cercano.

No le gustó lo que vio en él. Hizo una mueca y se enjugó las lágrimas.

                                                               Nela Bodoc – 2024

 

 

 

viernes, 7 de febrero de 2025

 



NO PERDER EL TIEMPO

 

He considerado al tiempo como a un bien ganancial. Pensé que podía utilizarlo, ganarlo o perderlo, de acuerdo a lo que hiciera, o sea un bien sometido a mis interpretaciones del momento.

Así aprendí a hacer dos cosas distintas a un tiempo, como escuchar el noticiero durante el desayuno, tejer mientras veía televisión o leer mientras descansaba los pies. Aprendí y conseguí el estrés.

La costumbre transforma en cultura los actos repetidos y determina qué está bien y qué está mal.

 

                                               Asunción – 2003

 

 

 

jueves, 6 de febrero de 2025

 

Cuento

 

                                               Encuentro nocturno.

Una luz, como una estrella moribunda, pulsaba a lo lejos, sobre la carretera…

La noche estaba más oscura que otras veces. No se distinguía nada en el campo.

Temiendo que se le cruzara algún animal, conducía con precaución.

Excepto el niño que iba a su lado, los demás dormían confiados.

La luz crecía, se hacía cada vez más brillante, a medida que se acercaban.

No les permitía distinguir esa forma oscura que se dibujaba frente a sus ojos.

Una gigantesca nave se depositaba sobre cuatro gruesos haces de luz, cuya forma no podían descifrar.

Aterrorizado, el conductor, quiso dar marcha atrás, y escapar de esa inexplicable situación. Pero el motor no respondía.

El niño, fascinado con lo que veía, se bajó del auto y antes de que se lo impidieran, corrió hacia las luces.

Una escalerilla se desplegó desde la nave. El padre, en estado de shock, pudo ver como su hijo subía sin mirar atrás.

De pronto se apagaron los haces de luz. Volvió la oscuridad. Está vez más amenazadora.

El motor se encendió. Los demás seguían durmiendo, confiados.

Nela Bodoc – 2025



 

 

miércoles, 5 de febrero de 2025

 

MICROCUENTO



            Había dos copas vacías sobre el blanco mantel, la casa estaba en silencio y las lágrimas rodaban por el rostro de Isabel.

                                                                   

                                                                           Ana María Muñoz - 2024

martes, 4 de febrero de 2025

 

 

                         Amaneció gris el día

                        Y no menos agradable,

                        Se ha calzado bien su talle.

                        Es un día bien de otoño

                        No trajo luces, ni moños,

                        Te arrima  lo que precisas.

                        Para empezar, es la vida,

                        Y tú precisas vivir…

                        El pan del distinto fluir

                        Sabiduría, conciencia,

                        Entrega, vigor,  paciencia,

                        Ingrediente indispensable.

                        Contigo mismo, sé amable

                        Eres amor y eres ciencia.

                                    Alberto Coronel - 2024



lunes, 3 de febrero de 2025

 





                 No pienso en dejar huella, sino en abrir camino.


                                                Dicho popular. 



  Descripción   Canción: “LIBRE” de Pedro Capó. La sensación de plenitud que invade mi alma al escuchar ese himno a la libertad, lleva...