viernes, 29 de abril de 2022

 

EL SEÑOR DEL DESTINO

 

Ser un Señor del Destino no es fácil, y sobre todo cuando se es tan anciano como yo, aunque  tiene la ventaja de acumular muchos recuerdos y de conocer todas las mañas que los hombres imaginan. Cada ser humano nace con un sinnúmero de posibilidades y debe forjarse su destino, y para ayudarles estamos los Señores del Destino.

Recuerdo allá por 1960 me tocó trabajar con un tal Torres, un pobre personaje que tenía sobrados motivos para estar muy agradecido por todos los favores que el Destino le había otorgado, pues era un tipo feo, de mal carácter y medio retraído y a pesar de todo se había forjado una carrera de contable y se había casado con una linda chica que además era hija del dueño del supermercado donde consiguió un buen puesto, el de tesorero de una de las sucursales que abrieron a 300 kilómetros de la capital.

Este señor creyó que podía torcerme el brazo, ignorando que a un Señor del Destino nadie puede torcerle ni siquiera un dedo sin sufrir las consecuencias, aunque en apariencia haya ganado, y este pobre, ni siquiera ganó.

El pobre infeliz, que no debía serlo porque tenía todo para ser feliz, ideó una forma de hacerse de dinero que dependía nada menos que del azar, como si alguien se hubiera hecho rico con eso.

Cada fin de semana sacaba de la caja fuerte fondos que llevaba al casino y apostaba, y a veces ganó unas pequeñas sumas, pero la mayoría de las veces perdía, entonces, cuando regresaba sacaba de las cajas de las pobres cajeras pequeños valores con los que cubría sus propias pérdidas, por lo que debí ingeniarme en buscar en aquellas chicas alguna que no estuviera tan asustada ni creyera en supersticiones, y le induje que tomara precauciones tomando nota de la numeración y cantidad de billetes en su caja, y lo dejara todo adentro de la misma, y cuando ella descubrió el resultado lo comunicó a sus amigas y todo volvió a la normalidad para ellas, no así para el ingenioso estafador que perdió su puesto, su familia y su dignidad.

           

                                                                                  Ama Riba  - 2003

           

 

jueves, 28 de abril de 2022

 

                        


                            Fui

 

        Yo fui sus piernas vigorosas que corrían,

        el aliento entrecortado de la boca,

        también la multitud que lo rodeaba.

        Su impetuosa juventud con ideales,

        el entusiasmo de la causa, sin juzgarlo.

        Yo corrí con él un destino ya marcado

        y sentí el cimbronazo del impacto,

        el grito de dolor que oprimía su garganta,

        el suelo sucio de otras sangres ya vertidas.

        Su sorpresa ante la realidad que no esperaba,

        y fui sus ojos inocentes entreabiertos,

        sus preguntas sin respuestas a esa hora…

        Fui todo eso y pude ser más

                                       Pero él, solo,

                                       hoy yace muy quieto…

 

                                                       Alicia Rita García

miércoles, 27 de abril de 2022

 


CLEUSSA

 

Mi perrita y yo hoy charlamos muy seriamente. Hace casi 10 años que estamos juntas.

 Nació el 25 de diciembre de 2010, fui a conocerla cuando tenía una semana de haber llegado a este mundo, era tan pequeña que cabía en la palma de mi mano. Llegó a mi hogar el 30 de enero de 2011 y desde ese momento la amé. Hemos pasado juntas muchísimos momentos bellos y de los otros también.

 Es mi compañera y mi confidente, ahora hasta dormimos en la misma cama, que quedó demasiado grande cuando mi compañero de vida se marchó para siempre. Por eso, hoy le expliqué esto del virus. Le dije cuánto la quiero y lo importante que es ella para mí. Le dije que quiero seguir a su lado, pero que no sé si eso será posible.

 Hoy me sentía angustiada por primera vez en este aislamiento que lleva ya muchísimos días. Me escuchó en silencio, hasta que de pronto me sonrió y me acarició con sus patitas blancas y peludas.

 Tranquila -me dijo -Estaremos juntas por mucho tiempo más.

 ¿Te parece?- le respondí.

 Sí, ya verás cómo salimos de esta- dijo convencida de que así sería. La abracé y así nos quedamos dormidas en el sillón. Cuando desperté, el nudo en mi garganta había desaparecido y sentí paz y alivio en mi alma. Cleussa dormía y roncaba feliz sobre mi pecho.

 

 Ana María Muñoz - 2020

 

martes, 26 de abril de 2022

 


¿Qué será de mí cuando prepare mi partida?

¿Dejaré que se marchen mis fantasmas?

¿O les pediré que sigan siendo mis compañeros de camino?



 

El caminante del cielo

 

El caminante del cielo vive aquí, pero no es de la tierra, vino para aprender los puntos de referencia en este momento y enseñarlos a los demás.  Cambia con las épocas, aunque sabemos que hay cosas internas del ser que no cambian, pero a veces se olvidan.

Caminaba yo por el parque lleno de plantas y árboles hermosos cuando de pronto un claro… cosa rara allí, pero había un niño jugando, tratando de embocar la pelota en un aro de básquet.

-¿Un partidito, señor? Me preguntó

-¡Dale! -Y me fui yendo por su camino de luz, dejando de lado a la cuenta del banco, lo que hay que pagar para sostener el estatus y todo el trabajo que hay que hacer y bueno… ¡Menos mal que los niños no se ocupan de eso! Sólo juegan y son felices, ni siquiera me preguntó quién era y si tenía dinero.

-Todo está en aprender a volar –me dijo.

-¿Perdón? – respondí.

-Si toma la pelota con las manos así, se impulsa con el cuerpo y deja que su alma vuele, es decir la pelota, luego fácilmente emboca ¿Ve?

No lo pude ver tan pronto pero como me ganaba mucho decidí intentarlo. Su risa franca llenaba el viento como una campanita y festejaba cada ¡Goooool  como un fanático de fútbol.

-Solo hay que dejar de ser, para ser –dijo entre risas.

-¿Cómo? ¿Qué? – dije perplejo.

De pronto me vi jugando como un experto, cada vez que tiraba y me dejaba soltar y fluir me sentía dueño del todo. No había nada que me faltara. Tuve la sensación de presentir toda la realidad, la que se ve y la que no, de la que soy consciente y la que intuyo de otros planos, otras vidas, no sé, mi inconsciente humano.

Vi la totalidad que hasta el momento era escueta, ahí nomás delante de los ojos.

Reí también y festejé en lo alto del cielo sin límites.

Nunca había sentido el amor tan cerca, tan supremo, tan todo y tan pequeño y cotidiano.

Nos despedimos y continué mi caminata feliz con algo nuevo en mi corazón y en mi mente.

¿Será que estamos atados a valores de un materialismo indómito que nos produce ansiedad y nos afecta negativamente marcándonos un estilo de vida que seguramente no condice con nuestra necesidad de sentido?

Pensando y pensando, después de un rato volví a pasar por el mismo lugar y no estaba ni siquiera el aro, solo había un pequeñito espacio de tierra pelado, sin forma, con algunas plantas que estaban colocando.

-Eres artífice de tu destino vuela alto. En ver más allá está el equilibrio. -Escuché su campanita de risa surcando el aire.

 

 

Mirta Fernández - 2022

 

lunes, 25 de abril de 2022

 

        PROMESAS  ROTAS 

           

Promesas hechas al alma

años de angustias en vela,

deseos que no se plasman,

y sueños que andan en pena.

 

Dolor que corre en las venas,

fuego que sigue encendido

hielo que escarcha la calma,

lava que hierve por dentro

luz que  ilumina las sombras,

nieve que cubre las rocas,

volcán que sigue rugiendo,

sombras que ahogan el fuego

en días de largos silencios.

 

Amor quebrado en pedazos,

anhelos que no se colman,

días de llantos callados

unión que busca mi alma

por caminos ya trillados.

 

¿Dónde encuentro el abrazo

que anhelo con lo Divino?

Tal vez de tanto mirar mis fuegos,

mis escarchas y mis sombras

he equivocado el camino.

 

                Asunción Ibáñez


  Publicado en “QUIMERAS” pág. 44

       Sexta Impresiones – 2018

                Con autorización

 

 

 

 

 

domingo, 24 de abril de 2022

 

                        Le encantaba asistir a las presentaciones de libros.

                No leía, pero dejó una hermosa biblioteca a sus herederos.


                                                                             Iris Nelly

viernes, 22 de abril de 2022

 

Cuento infantil

 

La pócima de Bruseida

 

Ella era un hada algo venida a menos. Con el tiempo, con los siglos, había perdido, junto con sus habilidades, su popularidad.

Había sido muy solicitada por los jóvenes que sufrían los males del amor y por los encantamientos más difíciles de resolver. Pero ahora casi nadie la recordaba. Otras hadas, más modernas, la habían desplazado.

Bruseida no se resignaba a esta situación. Se devanaba sus mágicos sesos pensando en alguna solución -Tengo que crear una fórmula novedosa, que sea efectiva y rápida- se decía en voz alta.

Una tarde, deambulando por una plaza, mientras elucubraba, vio algo que llamó su atención. Era un viejo payaso, sentado sobre un banco, tapándose el rostro con las manos para ocultar su llanto.

¡Hombre! ¿Qué le pasa? ¿Por qué está tan triste?- preguntó conmovida Bruseida.

Me sucedió lo peor-contestó él He perdido la capacidad de hacer reír- Los niños no se divierten conmigo. Huyen cuando me ven ¡Buahh! -agregó sollozando.

Yo lo voy ayudar-le dijo ella- ¡Para eso estamos las hadas!

Sorprendido, el viejo payaso le preguntó - ¿Usted es un hada? ¡No lo hubiera imaginado! ¡Hummmm!

Deberá seguir al pie de la letra mis instrucciones. Pronto le traeré la cura a su mal -dijo ella desapareciendo.

Esta es mi oportunidad de recuperar mi brillo. Tendré que ser muy creativa –pensó el hada. Y esa noche no pegó un ojo. Se fue al bosque a la mañana siguiente a pedir consejos a viejos amigos. Se encontró con su amiga, la bruja Dominica y hablaron un largo rato. Luego le chistó a la lechuza tuerta y le hizo unas preguntas. Por último, antes del amanecer se comunicó con Pollux, la única estrella que le llevaba el apunte.

A la semana, había logrado reunir todos los ingredientes, que eran:

-3 plumas de la lechuza tuerta

-5 pestañas de la bruja Dominica

-Un puñado de polvo de estrella (de Pollux)

-Una carcajada de hiena albina

-1 cucharada de miel de avispas jubiladas

-7 suspiros de monja

-9 pétalos de la flor de nácar

-3 maullidos de gatitos recién nacidos

-200 cc de savia de baobab

-1 sueño doble de mellicitos

Puso todos los ingredientes en un pequeño caldero y revolviendo con una cuchara de madera de cerezo, cocinó todo mientras invocaba la conocida oración de las hadas antiguas.

No hace falta que les diga que su pócima fue muy exitosa. El viejo payaso recuperó a su público infantil y lo incrementó notablemente.

Y Bruseida todavía está gozando de una renovada popularidad.

 

Nela Bodoc - 2021

jueves, 21 de abril de 2022

 

 

Haiku


Los ojos abrió,

Miró a su derredor

Y todo lo vio.

            Nela

 

Mi pasado

 

El puñado de tierra

que guardo en mi mano

conserva los siglos

de la humanidad.

 

Huesitos de polvo

y arena dorada,

con vidas y muertes

mezclados están.

 

Tal vez una tarde

de tantas del mundo,

me viste contenta

bajo este mismo sol…

 

O moría en la angustia

encerrada en la cárcel

de alguna experiencia

que no trascendió.

 

               Mirta Fernández - 2021

miércoles, 20 de abril de 2022

 

Mi lado creativo

Querida tía:

Hola tía, buen día. Fue muy lindo conocernos el sábado pasado en casa de Jorge, la conversación que sostuvimos me llenó de inquietudes y preguntas y quería hacer algunos aportes, compartir con vos algunas ideas.

Particularmente no me considero muy creativa. Admiro a las personas que sí lo son.

Encuentro creatividad al escribir o dibujar a mano, al ver una obra de arte, al caminar por las montañas, al sentarme a meditar. También la encuentro al hacer ejercicios de respiración y sentir a Dios cuidándonos.

Dicen que la creatividad es la capacidad o habilidad para inventar o crear cosas nuevas. Que se trata de la posibilidad de generar lo nuevo, lo cual conduce habitualmente a nuevas soluciones a los problemas.

En ese sentido, creo que todos podemos ser útiles y creativos. Yo, como mujer sola y soltera, dedico mi tiempo al estudio, a cultivar buenas relaciones, a orar, a hacer trabajo manual y escribir. En todas ellas pongo un toque de alegría, color y agradecimiento, y allí aplico la creatividad también.

¿Cómo aplicás vos la creatividad en tu vida cotidiana? ¿Y con tu familia? ¿Cómo la aplicás en el trabajo? Es maravilloso ser creativas.

Gracias por tan bella conversación. Volveré a visitarte en agosto, para aprender mejor de tan buenas habilidades y posibilidades.

Gabriela.

 

María Gabriela Medawar – 2022

 

martes, 19 de abril de 2022

 

Reversibilidad.

Caminó uno, dos, tres pasos, volvió hacia atrás tres, dos uno.

Y se quedó en el mismo lugar.

Sella 2021

 

DESEOS

 

Tal vez noviembre llegue calmo,

o tal vez sea un torbellino de emociones.

Desearía solo poder soñar

con ese jueves de noviembre en que te conocí.

 

El tiempo, tirano absoluto y cruel,

ha ido diluyendo los recuerdos

y tu rostro tan amado y tu tierna voz,

se escabullen en las sombras del olvido.

 

¡Ay cariño mío, cuanto deseo volver

a transitar los años del ayer!

Tal vez me dormiré en silencio y en el secreto oscuro

de mi postrer aliento te encontraré

y mi deseo se cumplirá.

 

Ana María Muñoz - 2021

lunes, 18 de abril de 2022

 

Doy vida.

Todo estaba reseco, las ramas de los árboles extendían sus brazos suplicantes pidiendo agua. La tierra crujía, gruñía y se resquebrajaba.

Una luz partió de un lejano punto en el cielo y se acercó despacito al lugar.

A su paso esparcían gotas de un rocío brillante, rocío del universo.

 -¿Qué haces? -Pregunté

 -Doy vida- respondió con naturalidad

 -¿Cómo lo logras?

 -La traigo conmigo. La dosifico y la entrego- fue su respuesta.

- ¿Y si no te alcanza?- insistí.

- Vuelvo allí, a la fuente donde surge la energía y la recargo.

- Quisiera verte mejor- agregué-  tu luz me deslumbra ¡Es tan fuerte!

- No me mires a mí. Fíjate en lo que va quedando detrás de mí y me verás en el reflejo de los verdes, los rosas, los celestes. Allí queda mi rostro impreso –dijo con dulzura.

- Vas encendiendo el campo. Lo que veo son luces, luces saltarinas que bailan ¡Parece que ríen! – comenté.

- ¡Claro que ríen! ¡Están felices porque despiertan hacia la luz y hacia la vida una vez más! –dijo sonriendo.

- Me gustas – agregué-  ¿No te quedarías aquí conmigo a contarme tus secretos?

- No puedo – farfulló- mi trabajo no termina nunca. Por donde paso dejo mi estela y ¡Es tan vasto el Universo!

- ¿Trabajas solo? – inquirí.

- ¡No! ¿No ves toda la luz de vida que me acompaña? -Y agregó- Ella va conmigo, sin ella mi ser no tendría sentido.

- Adiós entonces  -le dije.

Y se fue, llevándose el perfume y la voz de los lirios y de los manzanos que lo despedían felices.

- ¿Cómo te llamas? –grité- ¡No sé ni tu nombre!

- Adivina … -respondió y partió sin volver a mirar su obra.

Su obra burbujeante de colores y de vida.

Clara Molina - 2021

sábado, 16 de abril de 2022

 



                                            Sábado de Gloria


Sé feliz con lo que tengas,

y haz feliz a tu entorno,

sé veraz sin tanto adorno,

sé medido en tu hablar,

que tu silencio sea paz

y tu sentir verdadero,

son las máximas de vida,

del que murió en el madero.

                                                          

                                          Alberto Coronel



 



He tenido la posibilidad de convivir con miles de millones de seres humanos, algunos que ya partieron y otros que seguirán aquí mientras yo cumpla el mandato de mi destino, pero en esta vastísima eternidad, en el suspiro que dura nuestra presencia, hemos compartido mucho, aunque creamos humildemente que “La sabiduría nos persigue, pero somos más rápidos” (Graffiti) creo que realmente avanzamos a pesar de todo, y llama a nuestra puerta cuando  el deterioro o la Muerte están frente a nosotros. La gran pregunta es si puedo descubrirla.

                                                                      

 

                                                                                                Asunción - 2011

 

 

jueves, 14 de abril de 2022

 


Es un día de mucha calma,

día de mucha quietud,

resaltando la virtud

y pasión del Nazareno,

tiempo de sentires plenos,

recogimiento y amor,

de resaltar el valor.

¡Día de entrega, Señor!

 Alberto Coronel

 


Mejor sola que mal acompañada


Las mujeres viejas del pueblo aconsejaban a las jóvenes casaderas: “Mejor sola andar que mal casar” pero más tarde éste dicho fue cambiando y quedó como lo dice el título. Juanita era una muchacha muy audaz y tenía muchos varones interesados en ella; pero no confiaba en ninguno. Su madre la reprendía; porque quería casarla pronto ya que eran muchos en la casa y el dinero escaseaba.

La joven, cuando descubría que un pretendiente la engañaba con falsas promesas, se reía a carcajadas y le decía: - ¡Mejor sola que mal acompañada, querido! - Y así pasaba el tiempo y ella seguía soltera, le gustaba trabajar, leer, escribir y manejar su vida. En realidad, no quería casamiento alguno.

Las amigas de su edad todas tenían marido, algunas ya eran madres, Juanita en cambio disfrutaba su tiempo libre escribiendo en su cuarto, nadie sabía por qué pasaba tanto tiempo allí, era un secreto muy bien guardado.

Grande fue la sorpresa de todos cuando un día llegó a su casa una gran encomienda a su nombre; temblando de emoción la abrió y allí estaba su sueño realizado, había enviado sus escritos a una editorial y ahora tenía en sus manos el libro tan esperado: “CAMINAR SOLA” por Juanita Rosales

Su madre la abrazó con ternura y comprendió por qué  su hija era tan diferente a las otras muchachas del pueblo.

No hubo fiesta de casamiento, la muchacha eligió pasar la vida sin un marido y fue feliz con el éxito de sus libros, que además le permitió ayudar con las finanzas de la familia.


 Ana María Muñoz - 2020



 

 

 

miércoles, 13 de abril de 2022

 

Haiku

 

Rostro de niño,

suave flor de durazno,

risa que brota.

 


Cuando te pienso

 

Cuando te pienso

recuerdo tu sonrisa,

escucho las sonoras carcajadas,

todo está aquí, en mi recuerdo,

lo bien que lo pasábamos,

lo mucho disfrutado,

todo terminaba en risas contagiosas.

¡Qué lejos que ha quedado!

Y ahora que el tiempo ha transcurrido,

eso era la felicidad y la perdimos.

 

Alicia Rita García - 2022

martes, 12 de abril de 2022

 

Microcuento.

 

Grata sorpresa

Y el niño pisó con alegría las hojas que ella estaba barriendo tan abstraídamente.

 

                                                               Gabriela Medawar – 2022

 

El caminante del cielo

 

El caminante del cielo vive aquí, pero no es de la tierra, vino para aprender los puntos de referencia en este momento y enseñarlo a los otros. Siempre sabemos que ellos cambian con las épocas del tiempo, pero también que hay cosas internas del ser que no cambian, pero a veces se olvidan.

Caminaba por el parque lleno de plantas y árboles hermosos cuando de pronto un claro… cosa rara allí, pero había un niño jugando, tratando de embocar la pelota en un aro de básquet.

-¿Un partidito, señor?

-¡Dale!

Y me fui yendo por su camino de luz, dejando de lado a la cuenta del banco, lo que hay que pagar para sostener mi estatus y todo el trabajo que hay que hacer, ¡Y bueno! Menos mal que los niños no se ocupan de eso, solo juegan y son felices… Ni siquiera me preguntó quién era y si tenía dinero.

-Todo está en aprender a volar- comentó.

-¿Perdón? – respondí.

-Si toma la pelota con las manos así, se impulsa con el cuerpo y deja que su alma vuele, es decir la pelota…luego fácilmente emboca ¿Ve?

No lo pude ver tan pronto pero como me ganaba mucho decidí intentarlo. Su risa franca llenaba el viento como una campanita y festejaba cada ¡Goooool! como un fanático de futbol.

-¡Solo hay que dejar de ser, para ser! –dijo como al pasar.

-¿Cómo? ¿Qué? – dije perplejo-

De pronto me vi jugando como un experto, cada vez que tiraba y me dejaba soltar y fluir me sentía dueño del todo.

No había nada que me faltara. Tuve la sensación de presentir toda la realidad: la que se ve y la que no, la que soy consciente y la que intuyo de otros planos, otras vidas, no sé, mi inconsciente humano. Vi la totalidad que hasta el momento era escueta, ahí nomás delante de los ojos.

Reí también y festejé en lo alto del cielo sin límites.

Nunca había sentido el amor tan cerca, tan supremo, tan todo y tan pequeño y cotidiano.

Nos despedimos y continué mi caminata feliz con algo nuevo en mi corazón y en mi mente.

Después de un rato volví a pasar por el mismo lugar y no estaba ni siquiera el aro, solo había un pequeñito espacio de tierra pelado, sin forma, con algunas plantas que estaban colocando.

-Eres artífice de tu destino, vuela alto. En ver más allá está el equilibrio.

Escuché su campanita de risa surcando el aire…

 

Mirta Fernández -2022

 

lunes, 11 de abril de 2022

 

 El caso

INSÓLITO

EL martes pasado, en horas de la mañana, un paisano de un paraje vecino de Guardia Escolta, al emprender su recorrido por el campo encontró un toro solitario   bicolor. El animal yacía parado, apoyando su cabeza sobre el poste de una casona deshabitada y se mantenía inmóvil en esa posición. El lugareño presenció la escena por más de una hora.-

 

La anécdota

 

MAÑANA INSÓLITA

 

José se despertó temprano. Como todas las mañanas cogió el mate y salió al patio. Se sintió abrazado por el tibio sol que iluminaba el paisaje campestre pintado  de tonalidades verdosas.

Miró a lo lejos, un campo extenso lo esperaba para recorrerlo.

Se acomodó la ropa, se puso el sombrero y caminó hacia su brioso alazán. Subió al   caballo y con galope tranquilo se desplazó agrupando las distintas manadas de cabras y terneros que pastaban en lugares dispares.

De pronto, se detuvo al pasar por una casa deshabitada desde hacía largo  tiempo, y    observó un toro bicolor parado al costado de la misma. Se apeó del caballo, se acercó lentamente y, deteniéndose detrás de unos árboles se acurrucó para observar la escena.

El animal, robusto, de pelaje marrón y blanco, estaba parado apoyando su cabeza sobre uno de los postes de la vivienda.

Se adelantó unos pasos y se paró frente al toro por unos minutos, pero este continuaba en la misma posición apoyando su frontal en el parante. No se movía.

De cuerpo vigoroso, sostenido por fuertes patas y con su cola impávida denotaba una actitud de “de aquí no me muevo”.

Luego el lugareño optó por arrodillarse y arrastrándose despaciosamente se acercó por el costado del toro buscando alguna herida en su cabeza.

Sorpresa le causó al observar que el animal tenia abierto sus ojos, los movía de izquierda a derecha y viceversa en movimiento continuo.

Se sentó sobre el pasto, se sentía desorientado, continúo observando inmóvil la escena. Su mirada recorría la mirada del animal y el poste de abajo a arriba. De pronto, se paró de un salto al comprobar que los alambres de arriba que sostenían al techo sobre el poste estaban cortados unos y otros en el suelo.

Miró al toro y súbitamente comprendió que los movimientos de los ojos del animal le indicaban que él se encontraba allí, en esa posición, para sostener el poste evitando su caída. -

CRISTINA MAIDANA - 2022



 

Consigna: trabajar sobre la imagen de un vacuno apoyando su cabeza sobre una columna.

a)      Caso. Objetivamente.

b)      Anécdota: Oubjetivamente.

domingo, 10 de abril de 2022

 



Agradecer la vida,

agradecer los sueños.

Agradecer el agua

y el calor de los leños.

Alberto Coronel

sábado, 9 de abril de 2022

 

Micro cuento

 

 

Despedida

Tus huellas en la tierra húmeda se alejan hasta que no puedo divisarlas. Sé que no volverás.

 

María Eugenia Bazzalo - 2021

 

viernes, 8 de abril de 2022

 

Metáforas

 

 

A tiempo

 

El niño iba aferrado a la mano de su hermana como los zarcillos del parral de su patio.

Estaba atemorizado por la tormenta que se avecinaba. Los truenos parecían cientos de carros tirados por oscuros caballos, atravesando el cielo.

El pobrecito estaba más asustado que un gato que se refugia de una lluvia torrencial. Venían de hacer las compras que se les habían encomendado, más cargados que carrito de supermercado a principio de mes.

La madre los esperaba, vigilante e impaciente, parada en la puerta como guardia de palacio. Es brava. Los tiene cortitos como esperanza de pobre.

Por suerte, llegaron justo a tiempo pues se descargó el agua con la furia del diluvio universal.

 

Nela Bodoc - 2021



jueves, 7 de abril de 2022

 


                                                                    Reclamo


“El granjero de una granja ecológica se ha demorado en sus tareas. Sus animales se han arrimado a buscarlo. Fue increíble porque todos supieron dónde buscarlo, estaba en su casa cercana, donde desayunaba con su nieto.

Una vaca joven, de manchas marrones, como denunciando el suceso, empujó la columna de la entrada, obligando al granjero a salir corriendo.

Desde entonces, el granjero se hace responsable, alimentando puntualmente a los habitantes de tan inusual granja.


                                                Gabriela Medawar - 2022



miércoles, 6 de abril de 2022

 

 

Despertar

 

                Veo el cielo azul por la ventana

                Inundado por el sol de la mañana,

                Y veo pasearse nubes blancas,

                Como gasas desplegadas.

                Entonces me lleno de alegría

                Y abro las ventanas de mi alma

                Para llenarme del sol de la mañana.

 

        María del Carmen Medina - 2022

martes, 5 de abril de 2022

                            


                                    Las sombras caminaban su dolor y un manto

                    de tristeza cubría su sonrisa.

                                                                                           Ana María Muñoz


 

Mi otro yo

                                                   ¿DIVINA U ODIOSA ?


Ella se desvivía en saludos, besos, abrazos. Por dentro un eco repetía “¡Qué plomo! ¿Otra vez por acá?”

Ella se esmeraba en dulces y extravagantes agradecimientos. Por detrás, su cuerpo decía “¡Qué asco! ¡Repugnante!”

Ella se extenuaba en atenciones y favores. Por abajo circulaban los “ufas” y los “qué cargosos!”.

Ella se miró al espejo, y el espejo (silenciosamente) le devolvió: ¡Odiosa!


                                                                                    ADRIANA BRESCIA - 2022

lunes, 4 de abril de 2022

 

Discernimiento

 

Discernir es una de las necesidades imperiosas de nuestra época.

Vivimos en una sociedad que nos satura diariamente de mensajes, no siempre bien fundamentados, ni investigados, ni actualizados, y en algunos casos no son verdaderos.

La publicidad nos induce a juzgar un producto y respondemos automáticamente considerando que es bueno para nosotros lo que solo responde a intereses ajenos, acudiendo, en ocasiones, como autómatas a ese “llamado” sin detenernos a discernir.

“Distinguir por medio del intelecto una cosa de otra o varias cosas entre ellas” dice el diccionario, por lo tanto, debiéramos evaluar los pro y los contra antes de cada decisión, por ejemplo, antes de realizar una compra importante, o antes de comprometerme a hacernos cargo de algo que implique responsabilidad o tiempo de nuestra parte parte.

Al planificar el día, la semana, el mes y el año ¿Contemplamos espacios para disfrutar de la familia y los amigos, el descanso, la lectura y la información, y sobre todo el ejercicio físico? Es respetar nuestro equilibrio emocional y nuestra salud mental.

Discernir es priorizar un orden en nuestro modo de vivir, lograr metodizar nuestros días.

 

Iris Nelly - 2018

 

 

viernes, 1 de abril de 2022

 

                                                                Presentimiento

 

Comencé a relajarme cuando el avión  ya carreteaba por la pista. Al fin despegaríamos después de tanta tensión en el trasbordo y de los trámites. Busqué mi anteojera y mis tapones para los oídos para prepararme a dormir una buena siesta, que creía merecer.

En ese momento me estremeció una serie de gritos histéricos de una anciana en la fila de al lado, que al parecer viajaba sola, y que la proximidad de las azafatas que acudieron en su ayuda parecía alterarla aún más -¡Quiero bajarme! ¡No quiero seguir aquí! ¡Por favor, déjenme bajar!- tanto escándalo se desató que el despegue fue abortado y regresamos, con la mirada severa y descalificadora de todo el pasaje y el notable disgusto de la tripulación.

Cumplimentado el trámite del descenso de la pasajera, los motores volvieron a subir su aceleración pero ¿Serían mis oídos o no sonaban igual?

Nuevamente bajó la aceleración, y el capitán comunicó por altavoz que en media hora despegaríamos. Media hora después, nos pidieron que descendiéramos pues había un “pequeño” inconveniente técnico que pronto corregirían.

Dos horas después nos informaron que partiríamos en otra nave de la misma compañía, pues el inconveniente no había sido solucionado.

Nos dirigimos en silencio hacia el nuevo transporte, creo que todos orábamos por aquella desconocida que tal vez presintió y que quizás nos salvó la vida a más de trescientas personas.

                                                              

                                                                                              Asumi - 2022



  Reflexiones                                                                                                           CAMINO       ESPIRIT...